lunes, 31 de diciembre de 2018

LA BIBLIA: PROVERBIOS 9

 
LA BIBLIA
PROVERBIOS 9

La Sabiduría y la mujer insensata

1. La sabiduría edificó su casa, Labró sus siete columnas.
2. Mató sus víctimas, mezcló su vino, Y puso su mesa.
3. Envió sus criadas; Sobre lo más alto de la ciudad clamó.
4. Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dice:
5. Venid, comed mi pan, Y bebed del vino que yo he mezclado.
6. Dejad las simplezas, y vivid, Y andad por el camino de la inteligencia.
7. El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; El que reprende al impío, se atrae mancha.
8. No reprendas al escarnecedor, para que no te aborrezca; Corrige al sabio, y te amará.
9. Da al sabio, y será más sabio; Enseña al justo, y aumentará su saber.
10. El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, Y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia.
11. Porque por mí se aumentarán tus días, Y años de vida se te añadirán.
12. Si fueres sabio, para ti lo serás; Y si fueres escarnecedor, pagarás tú solo.
13. La mujer insensata es alborotadora; Es simple e ignorante.
14. Se sienta en una silla a la puerta de su casa, En los lugares altos de la ciudad,
15. Para llamar a los que pasan por el camino, Que van por sus caminos derechos.
16. Dice a cualquier simple: Ven acá. A los faltos de cordura dijo:
17. Las aguas hurtadas son dulces, Y el pan comido en oculto es sabroso.
18. Y no saben que allí están los muertos; Que sus convidados están en lo profundo del Seol.

sábado, 29 de diciembre de 2018

LA BIBLIA: PROVERBIOS 8

LA BIBLIA
PROVERBIOS 8
 

Excelencia y eternidad de la Sabiduría

1. ¿No clama la sabiduría, Y da su voz la inteligencia?
2. En las alturas junto al camino, A las encrucijadas de las veredas se para;
3. En el lugar de las puertas, a la entrada de la ciudad, A la entrada de las puertas da voces:
4. Oh hombres, a vosotros clamo; Dirijo mi voz a los hijos de los hombres.
5. Entended, oh simples, discreción; Y vosotros, necios, entrad en cordura.
6. Oíd, porque hablaré cosas excelentes, Y abriré mis labios para cosas rectas.
7. Porque mi boca hablará verdad, Y la impiedad abominan mis labios.
8. Justas son todas las razones de mi boca; No hay en ellas cosa perversa ni torcida.
9. Todas ellas son rectas al que entiende, Y razonables a los que han hallado sabiduría.
10. Recibid mi enseñanza, y no plata; Y ciencia antes que el oro escogido.
11. Porque mejor es la sabiduría que las piedras preciosas; Y todo cuanto se puede desear, no es de compararse con ella.
12. Yo, la sabiduría, habito con la cordura, Y hallo la ciencia de los consejos.
13. El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco.
14. Conmigo está el consejo y el buen juicio; Yo soy la inteligencia; mío es el poder.
15. Por mí reinan los reyes, Y los príncipes determinan justicia.
16. Por mí dominan los príncipes, Y todos los gobernadores juzgan la tierra.
17. Yo amo a los que me aman, Y me hallan los que temprano me buscan.
18. Las riquezas y la honra están conmigo; Riquezas duraderas, y justicia.
19. Mejor es mi fruto que el oro, y que el oro refinado; Y mi rédito mejor que la plata escogida.
20. Por vereda de justicia guiaré, Por en medio de sendas de juicio,
21. Para hacer que los que me aman tengan su heredad, Y que yo llene sus tesoros.
22. Jehová me poseía en el principio, Ya de antiguo, antes de sus obras.
23. Eternamente tuve el principado, desde el principio, Antes de la tierra.
24. Antes de los abismos fui engendrada; Antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas.
25. Antes que los montes fuesen formados, Antes de los collados, ya había sido yo engendrada;
26. No había aún hecho la tierra, ni los campos, Ni el principio del polvo del mundo.
27. Cuando formaba los cielos, allí estaba yo; Cuando trazaba el círculo sobre la faz del abismo;
28. Cuando afirmaba los cielos arriba, Cuando afirmaba las fuentes del abismo;
29. Cuando ponía al mar su estatuto, Para que las aguas no traspasasen su mandamiento; Cuando establecía los fundamentos de la tierra,
30. Con él estaba yo ordenándolo todo, Y era su delicia de día en día, Teniendo solaz delante de él en todo tiempo.
31. Me regocijo en la parte habitable de su tierra; Y mis delicias son con los hijos de los hombres.
32. Ahora, pues, hijos, oídme, Y bienaventurados los que guardan mis caminos.
33. Atended el consejo, y sed sabios, Y no lo menospreciéis.
34. Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas cada día, Aguardando a los postes de mis puertas.
35. Porque el que me halle, hallará la vida, Y alcanzará el favor de Jehová.
36. Mas el que peca contra mí, defrauda su alma; Todos los que me aborrecen aman la muerte.

viernes, 28 de diciembre de 2018

LA BIBLIA: PROVERBIOS 7

 
LA BIBLIA
PROVERBIOS 7


Las artimañas de la ramera

1. Hijo mío, guarda mis razones, Y atesora contigo mis mandamientos.
2. Guarda mis mandamientos y vivirás, Y mi ley como las niñas de tus ojos.
3. Lígalos a tus dedos; Escríbelos en la tabla de tu corazón.
4. Dí a la sabiduría: Tú eres mi hermana, Y a la inteligencia llama parienta;
5. Para que te guarden de la mujer ajena, Y de la extraña que ablanda sus palabras.
6. Porque mirando yo por la ventana de mi casa, Por mi celosía,
7. Vi entre los simples, Consideré entre los jóvenes, A un joven falto de entendimiento,
8. El cual pasaba por la calle, junto a la esquina, E iba camino a la casa de ella,
9. A la tarde del día, cuando ya oscurecía, En la oscuridad y tinieblas de la noche.
10. Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón.
11. Alborotadora y rencillosa, Sus pies no pueden estar en casa;
12. Unas veces está en la calle, otras veces en las plazas, Acechando por todas las esquinas.
13. Se asió de él, y le besó. Con semblante descarado le dijo:
14. Sacrificios de paz había prometido, Hoy he pagado mis votos;
15. Por tanto, he salido a encontrarte, Buscando diligentemente tu rostro, y te he hallado.
16. He adornado mi cama con colchas Recamadas con cordoncillo de Egipto;
17. He perfumado mi cámara Con mirra, áloes y canela.
18. Ven, embriaguémonos de amores hasta la mañana; Alegrémonos en amores.
19. Porque el marido no está en casa; Se ha ido a un largo viaje.
20. La bolsa de dinero llevó en su mano; El día señalado volverá a su casa.
21. Lo rindió con la suavidad de sus muchas palabras, Le obligó con la zalamería de sus labios.
22. Al punto se marchó tras ella, Como va el buey al degolladero, Y como el necio a las prisiones para ser castigado;
23. Como el ave que se apresura a la red, Y no sabe que es contra su vida, Hasta que la saeta traspasa su corazón.
24. Ahora pues, hijos, oídme, Y estad atentos a las razones de mi boca.
25. No se aparte tu corazón a sus caminos; No yerres en sus veredas.
26. Porque a muchos ha hecho caer heridos, Y aun los más fuertes han sido muertos por ella.
27. Camino al Seol es su casa, Que conduce a las cámaras de la muerte.

jueves, 27 de diciembre de 2018

LA BIBLIA: PROVERBIOS 6

 
LA BIBLIA
PROVERBIOS 6
 

Amonestación contra la pereza y la falsedad

1. Hijo mío, si salieres fiador por tu amigo, Si has empeñado tu palabra a un extraño,
2. Te has enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los dichos de tus labios.
3. Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo; Vé, humíllate, y asegúrate de tu amigo.
4. No des sueño a tus ojos, Ni a tus párpados adormecimiento;
5. Escápate como gacela de la mano del cazador, Y como ave de la mano del que arma lazos.
6. Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio;
7. La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor,
8. Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega su mantenimiento.
9. Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
10. Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las manos para reposo;
11. Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre armado.
12. El hombre malo, el hombre depravado, Es el que anda en perversidad de boca;
13. Que guiña los ojos, que habla con los pies, Que hace señas con los dedos.
14. Perversidades hay en su corazón; anda pensando el mal en todo tiempo; Siembra las discordias.
15. Por tanto, su calamidad vendrá de repente; Súbitamente será quebrantado, y no habrá remedio.
16. Seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma:
17. Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente,
18. El corazón que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal,
19. El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos.

Amonestación contra el adulterio

20. Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, Y no dejes la enseñanza de tu madre;
21. Atalos siempre en tu corazón, Enlázalos a tu cuello.
22. Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; Hablarán contigo cuando despiertes.
23. Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es luz, Y camino de vida las reprensiones que te instruyen,
24. Para que te guarden de la mala mujer, De la blandura de la lengua de la mujer extraña.
25. No codicies su hermosura en tu corazón, Ni ella te prenda con sus ojos;
26. Porque a causa de la mujer ramera el hombre es reducido a un bocado de pan; Y la mujer caza la preciosa alma del varón.
27. ¿Tomará el hombre fuego en su seno Sin que sus vestidos ardan?
28. ¿Andará el hombre sobre brasas Sin que sus pies se quemen?
29. Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; No quedará impune ninguno que la tocare.
30. No tienen en poco al ladrón si hurta Para saciar su apetito cuando tiene hambre;
31. Pero si es sorprendido, pagará siete veces; Entregará todo el haber de su casa.
32. Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; Corrompe su alma el que tal hace.
33. Heridas y vergüenza hallará, Y su afrenta nunca será borrada.
34. Porque los celos son el furor del hombre, Y no perdonará en el día de la venganza.
35. No aceptará ningún rescate, Ni querrá perdonar, aunque multipliques los dones.